Continuando nuestra ruta, a unos 30 minutos de Zahara, llegamos a Setenil de las Bodegas, un pueblo que sorprende por su singularidad. Este lugar es famoso por sus casas construidas directamente bajo enormes rocas, que crean un paisaje urbano único en el mundo. Setenil es un laberinto de calles que serpentean entre las formaciones rocosas, ofreciendo un ambiente fresco y sombrío incluso en los días más calurosos.
Uno de los puntos más emblemáticos de Setenil es la Calle Cuevas del Sol, donde las casas están literalmente incrustadas en las paredes rocosas, creando una atmósfera mágica. Aquí, encontrarás bares y restaurantes que ofrecen lo mejor de la gastronomía local, donde podrás disfrutar de platos típicos como el chorizo al infierno y las migas.
Además, Setenil de las Bodegas cuenta con un rico patrimonio histórico, incluyendo la Iglesia de la Encarnación, que data del siglo XV y combina elementos góticos y mudéjares, reflejando la rica historia cultural del pueblo.
Cuarta parada: Grazalema, naturaleza y tranquilidad
Finalizamos nuestra ruta en Grazalema, un hermoso pueblo blanco situado en pleno corazón del Parque Natural de la Sierra de Grazalema, a unos 30 minutos de Setenil. Este pueblo es conocido por ser uno de los lugares más lluviosos de España, lo que le confiere una vegetación exuberante que contrasta con el blanco de sus casas.
Grazalema es el destino ideal para los amantes de la naturaleza. Desde aquí, parten numerosas rutas de senderismo que te permitirán explorar los impresionantes paisajes de la sierra, como la Ruta del Pinsapar, que te lleva a través de un bosque de pinsapos, una especie de abeto endémica de la región.
El pueblo en sí es un lugar encantador para pasear, con sus calles empedradas, plazas tranquilas y vistas espectaculares de las montañas circundantes. La Plaza de España es el centro neurálgico de Grazalema, donde puedes relajarte y disfrutar de la atmósfera tranquila y acogedora del pueblo.
No puedes irte de Grazalema sin probar sus productos artesanales, como los quesos de cabra y oveja, que son famosos en toda la región, o sus mantas de lana, una tradición textil que se remonta a siglos atrás.
La Ruta de los Pueblos Blancos desde
TAIGA Conil es una experiencia que te sumergirá en la auténtica esencia de Andalucía. Desde la majestuosa Olvera, pasando por el encantador balcón natural de Zahara de la Sierra, el singular Setenil de las Bodegas, hasta la tranquila y hermosa Grazalema, cada uno de estos pueblos te ofrece una mezcla única de historia, cultura y naturaleza.
Durante tu estancia en Conil de la Frontera, te animamos a descubrir estos tesoros escondidos en las montañas gaditanas y disfrutar de todo lo que tienen para ofrecer. Ya sea que busques paisajes impresionantes, historia fascinante o simplemente una escapada tranquila, esta ruta te proporcionará una experiencia inolvidable. ¡Te esperamos en
TAIGA Conil para comenzar esta mágica aventura por los pueblos blancos de Cádiz!